Año con año, celebramos las tradiciones navideñas, sabiendo que las cosas cambian paulatinamente: nuevos amigos y familia se suman o se mudan. Pero es cierto que algo nunca cambiará, no importa todos los años que celebremos las fiestas decembrinas, ¡que no puede faltar la iluminación navideña!
Podríamos tomar esta manguera de luz LED de decenas de colores e instalarla a lo largo de pasillos (para dejarlos bordeados por luz) o a lo largo de travesaños y barandales.
Podemos crear caminos llenos de luz dinámica -pues la manguera tiene 8 funciones diferentes, como encendido constante, flash, ondas o parpadeos- que dejarán el interior de nuestro hogar igual de festivo que el exterior.
Esta serie de luces emitirá una delicada luz blanca, que se complementará con su diseño de 30 luces LED pequeñas y circulares. De este modo, una lluvia blanca parecida al azúcar glass saldrá de esta guirnalda para iluminar algún mueble o decoración especial, pues el modelo mide 93 cm de largo.
En cambio, si deseamos alumbrar un área más grande, necesitaremos más de esta serie. No olvidemos que trae focos y fusibles de repuesto, en caso de cualquier eventualidad.
Ahora bien, si queremos quitarnos de las manos la labor de colgar las series de luces a lo largo de la casa, podríamos conseguir este proyector. Dirigirá un haz de luz cuyos patrones de copos de nieve giratorios hipnotizarán a quien los vea, a lo largo de 7.6 m sobre una superficie plana.
Mientras gira en un caleidoscopio de luz azul y blanca, la luz generará la sensación de una tormenta de nieve, aunque con más encanto y menos frío que una de verdad. Por otro lado, también brindará luz de manera más segura que otras fuentes eléctricas.
Con una sola de estas series de 5.41 m de longitud podríamos decorar nuestro árbol navideño por completo, gracias a varios colores y numerosas luces LED.
Eso sí, en caso de que queramos innovar sin renunciar a ningún color, podemos acomodarla entre libros o incluso en una gran explosión de color adentro de un tazón decorativo, que luego podríamos acomodar justo en el centro de la mesa del comedor o sobre un mueble.
Para no hacer el cuento largo, esta serie de 60 luces LED es pequeña, pero rinde mucho; empalmarla con otros tipos de iluminación hará que saque todo su potencial.
Arriba, en las vigas de soporte, o incluso debajo de la mesa de la cocina: lo que importa es que nadie pueda tropezarse con ellos y que se vean fabulosos. De este modo, podrían verse las 300 luces blancas de esta serie, que serían capaces de abarcar todo el ancho de la cocina gracias a sus 9.93 m de largo. ¿Queremos intentarlo?
Este tipo de decoración sirve también como iluminación extra dentro de la cocina. Si pegáramos la serie corriendo por debajo de la isla de la cocina o a lo largo del travesaño, también funcionaría bien.
Una idea es instalar esta red de 70 luces de Home Accents para que cubra la ventana entera de una habitación, con el propósito de asemejar una lluvia colorida. Por otro lado, podríamos improvisar delicados muros mediante esta iluminación, separando la cocina de la sala o partiendo un cuarto en secciones.
Como siempre, hemos de verificar que no esté a muy baja altura, evitando así posibles choques. Iluminará en verde, amarillo, rojo y verde, ¡ponerla frente a un muro pálido hará destacar estos colores más!
Con esta serie de 70 luces tendremos toda la delicadeza de los copos de nieve en un solo resplandor LED. Podríamos colgarla de las rejas o vallas que rodean la casa, así como de la parte más alta de nuestra fachada.
Los copos de nieve de la serie emitirán una luz blanca que contrastará muy bien con la oscuridad, resultando en que funcionará muy bien en exteriores (en lugares de mediana altura, de preferencia). Pero no descartemos su uso en interiores.
Hagamos lucir espacios como la sala y el comedor con estas estalactitas de Lightshow, cuyas luces LED cambiarán de color blanco hasta llegar al morado. Aparte de que caerán en una curva estética, podremos conectarlas a otras series de luces gracias a su cable de 30 cm; permitiendo así la experimentación entre diferentes tipos de luces y modelos.
Por sí solas, las estalactitas son alargadas y afiladas, pero también pequeñas y discretas. Eso sí, su largo superior a 7 metros nos dará la oportunidad de aprovecharla por toda la habitación.
Encontraremos una inevitable distinción y elegancia en los pequeños focos LED de esta serie, cuya forma semeja pepitas de oro o pequeñas nueces doradas.
Podríamos colgarlas en línea recta a través de la habitación, más con el propósito de dibujar pequeñas constelaciones e innovar en la iluminación, probemos a pegarlas al techo en apretadas espirales.
Chispazos dorados, destello y un inevitable ánimo festivo se desenrollarán a lo largo de su 1.52 m de longitud.
Claro, podríamos rodear el árbol de Navidad con esta red de pequeñas luces (sus cables son de color verde, lo que potencia su camuflaje al estar frente el árbol), aunque ¿por qué desperdiciar tanto color?
Aportemos luz incandescente al techo de nuestro comedor o sala, instalando esta red de manera que cubra la superficie. De esta manera, cada luz LED parecerá una estrella en este techo artificial que montaremos.
En este caso, veremos que se desprenderán pequeños focos en ramificaciones de la estructura principal, dándole a esta serie de luces la apariencia de las ramas de un árbol.
Probemos a instalarlos de manera vertical sobre un muro al que le falte decoración, para crear un patrón de múltiples nodos de luz que, en esa posición, asemejarán un relámpago.
Si estuvieran todas estas opciones de luz en un mismo sitio, la sala o la entrada por ejemplo, el diseño particular de cada fuente de iluminación se perdería.
Debido a esto, colocar estas fuentes a lo largo de nuestro hogar reducirá la sobrecarga sensorial, con el propósito de que sea más agradable a la vista.
Procuremos balancear la compra de aquellas series de luces con dimensiones más gruesas (como las mangueras LED) contra las de focos más pequeños y ramificados a través de una superficie más amplia, tal como las redes de focos y aquella iluminación parpadeante.
De este modo -incluyendo la sana adición de proyectores de luz u otros aparatos eléctricos- la fuente de iluminación navideña no será de un mismo tipo.
Justo como suena, intentemos que las series de luces cambien de color paulatinamente. Por ejemplo, pongamos una serie de luz blanca al lado de una de color y vayamos alternando con cierto orden. Evitamos el cambio de color súbito, pero tampoco lo temamos; de todos modos esta es la época para innovar en decoración.
Ahora que tenemos una mejor idea en cuanto a tipos de iluminación navideña para cada espacio, nos resultará más fácil elegir aquella que resalte las características únicas de nuestro hogar. Lo mejor es que siempre podemos invitar a la familia a proponer nuevas opciones.